En 2001, una hambruna dramática asoló Malawi país africano lleno de pobreza. William Kamkwamba tuvo que dejar la escuela, sus padres (agricultores de maíz) no podían pagar la matrícula, unos 80 dólares aproximadamente, de acceso a la educación secundaria.
“En mi casa comíamos sólo una vez al día, por las noches… miré a mi padre y después a los campos de siembra secos. Era un futuro que no podía aceptar”.
William Kamkwamba decidió entonces continuar aprendiendo en la biblioteca local. Allí empezó a leer libros de ciencias. Como no sabía inglés, al principio sólo se fijaba en los gráficos y en las imágenes. Fue así como encontró con una imagen que cambiaría su vida y la de su pueblo; la foto de un molino de viento.
“El libro decía que un molino podía generar electricidad y bombear agua, y eso significaba riego”. Su objetivo: ayudar a su familia que no contaba con electricidad ni agua potable y luchar contra la sequía que azotaba Malawi.
William decidió empezar la construcción de su molino. Pero como no tenía los materiales necesarios tuvo que reutilizar chatarra y basura que pudo ir encontrando: el aspa de un ventilador, un amortiguador, los restos de una bicicleta y tubos de PVC.
La historia de William se expandió rapidamente. Un periódico local recogió la noticia y de ahí a varios medios internacionales. A su temprana edad , 14 años, abrió los ojos de muchos de sus compatriotas. “I tried it and I made it” (Lo intenté y lo hice). Las palabras de William emocionan en la conferencia organizada por TED.
Tras la charla, los miembros de la comunidad TED se unieron para ayudarlo a mejorar su sistema de energía mediante la incorporación de energía solar. Proyectos posteriores han incluido: agua potable, prevención de la malaria, iluminación de viviendas y un sistema de riego por goteo.
«William cambió su destino y la de su pueblo»
la Adversidad es el mejor campo para forjar el carácter del éxito, eligiendo principios y valores, creencias, en que invertimos el tiempo, la relación con los demás; En fin Nuestro destino
Un comentario en “Adversidad, el Campo Donde Se Forjó el Carácter de un Niño Africano”