Viendo con mis hijos las últimas películas de superhéroes, más otro programa de televisión que muestra a hombres comunes con alguna capacidad extraordinaria, he llegado a la conclusión que lo único que han hecho es exagerar esa capacidad de un hombre real a una caricatura ficticia. Como lo dice la siguiente frase celebre y los puntos de abajo de la imágen
La verdad es mil veces más maravillosa que la misma fábula: la realidad vuela más alto que la ficción a la que sirve a veces de alimento.
Evaristo Fernández San Miguel y Valledor (Gijón 26 de octubre de 1785 – Madrid 29 de mayo de 1862)
Hay hombres que cultivan su fuerza física y muchas sabemos que con la adrenalina, causada por el miedo o el enojo se pueden levantar cosas mucho más pesadas o saltarse un muro. También están los deportistas expertos en el uso de algún arma o disciplina
Otros desarrollan sus cerebros creando inventos a través de las facilidades de la tecnología hasta llegar al punto de ensamblarse con las maquinas o computadoras, o llegar al punto de adivinar lo que los demás piensan, no tanto leyendo mentes más bien leyendo el lenguaje corporal de los demás
Muchos instan por el patriotismo de ver mejor a su país o nación que ha sufrido el egoísmo de sus dirigentes o el ataque extranjero
Aquellos que han sufrido un accidente con probabilidades de muerto y que siguen vivos con algunos efectos colaterales
Los hay aquellos que viene de otros mundos, hasta llegar a copiar lo que solo un hombre hecho carne ha logrado, resucitar
En la realidad hasta los más débiles han podido obtener esa fuerza extínseca que nos permita lograr cosas extraordinarias